Les Blondes es una big band. Una big band de dos. Rock retroiluminado, denso e intenso, bajo la batuta de Gomichín, que tambien lleva el peso de la voz, la guitarra y sus 16 pedales; escoltado por Charly a la batería y a los coros; y ráfagas de fogonazos orquestados en la retaguardia.
‘Te Diría Que No’ es el primer adelanto del próximo disco de Les Blondes.
Comienza con un groove de batería y un riff de guitarra hipnótico que se repetirán como un mantra durante el resto de la canción. La entrada del bajo completa la sección rítmica y se convierte, irremediablemente, en una sintonía adictiva con la llegada del sintetizador a modo de ostinato. En esta parte de la canción se hacen notar las referencias funk de bandas como Red Hot Chili Peppers.
La voz principal, con notas muy altas para esta tesitura y gran cantidad de arreglos en la producción, resaltan influencias de Arctic Monkeys.
La repetición de los compases de las primeras estrofas se rompe con un falso estribillo que deja en cliffhanger al oyente. Y es que la estructura de Te diría que no no es normativa. Cada aria de la canción es distinta y el conjunto da como resultado una progresión tanto musical como emocional.
Igual que en bandas como Cala Vento o Viva Belgrado, esta canción no tiene estribillo. O quizá sí, solo que no se repite. Aquí la voz puede recordar a sonidos de Héroes del Silencio o Arde Bogotá.
‘Te Diría Que No’ termina con un sonido trasgresor configurado por baterías, guitarras, bajo y sintetizadores que hacen concluir con un éxtasis a medio camino entre la psicodelia y el rock progresivo.
‘Te Diría Que No’ usa como señuelo los ritmos pegadizos jingles y una elegante sobreproducción, para embaucar en su propia espiral y mostrar en su letra (y en las venideras dentro del próximo larga duración) una realidad incómoda y voluntariamente irresoluble.